viernes, 15 de mayo de 2015

La homilía de Don Julián para la festividad de San Isidro, 15 de mayo de 2015


San Isidro. 15 de Mayo

El pozo de San Isidro

Posiblemente el milagro más famoso de todos es el que salvó a su hijo Illán de una muerte segura. Al parecer, mientras San Isidro se encontraba trabajando en el campo su hijo cayó en el interior de un profundo pozo. Cuando llegó se encontró a su mujer, Santa María de la Cabeza desesperada y lamentándose por lo que había ocurrido. Ambos se pusieron a rezar junto al pozo y pronto el nivel del agua comenzó a subir hasta que el niño salió a la superficie. Este pozo es el que se puede ver si se visita el Museo de los Orígenes o Museo de San Isidro en la Plaza de San Andrés.

El saco de grano misterioso

San Isidro tuvo un gran amor por los animales y su relación con éstos también desembocó en otro capítulo milagroso. Un día que había nevado nuestro protagonista se dirigía al molino cargando sobre sus espaldas un pesado saco de grano. De camino sintió pena por un grupo de pájaros que, por culpa de la nieve, no eran capaces de encontrar su alimento en el suelo así que decidió compartir con ellos parte del cereal que cargaba. Cuando llegó a su destino descubrió con asombro que el saco estaba otra vez lleno.

Comida infinita para los pobres

Otro episodio milagroso es el de la llamada “olla de San Isidro”. El Santo organizaba de forma periódica (en algunos sitios he leído que todas las semanas, y en otros que de manera anual) comidas para los más necesitados. El caso es que en cierta ocasión, el santo no contaba con alimento suficiente para tantos asistentes. Para tratar de remediarlo, a la vez que rezaba comenzó a introducir el cazo en la olla y ésta parecía no tener fin. Siguió sirviendo más y más comida hasta que todos quedaron saciados.

El cuerpo incorrupto

Seguimos con los milagros atribuidos al patrón de Madrid, éstos ya acaecidos una vez muerto. El primero de ellos es que murió en 1172 y fue enterrado junto a la Iglesia de San Andrés. Sus restos fueron exhumados décadas más tarde y descubrieron con asombro que el cuerpo estaba incorrupto. Este milagro va estrechamente ligado al siguiente…

Sanación de Felipe III

Para finalizar, quería hablaros del milagro que le valió la beatificación al Santo. Estando Felipe III gravemente enfermo, éste pidió que le llevaran el cuerpo de San Isidro para ver si de esta forma su salud mejoraba. Como os podéis imaginar, esta “visita” al monarca tuvo un inmediato efecto sanador y en agradecimiento, el Rey inició los trámites de una beatificación que tuvo lugar el 14 de abril de 1619.
 
                                                           oooOOOooo

No hay comentarios:

Publicar un comentario